Un fuerte temporal en Argentina provoca al menos 16 muertes y severos destrozos

Un severo temporal con lluvias y vientos de más de 150 km/hora dejó al menos 14 muertos, destrozos, semiparalizó varias ciudades del centro de Argentina y dejó dos fallecidos en el oeste de Uruguay este fin de semana, informaron fuentes oficiales.
El presidente argentino, Javier Milei, viajó el domingo a Bahía Blanca, ciudad portuaria 800 km al suroeste de Buenos Aires donde murieron 13 personas -entre ellas un niño- al colapsar el techo de un club durante la tempestad el sábado.
Otras 14 personas resultaron gravemente heridas, según la municipalidad. Las víctimas fueron sorprendidas por la tormenta cuando se disputaba una competencia de patín en el tradicional club Bahiense del Norte, el mismo donde se formó el exastro mundial de baloncesto Manuel Ginóbili.
«Que la gente no circule, seguimos en estado de emergencia», dijo el domingo a los vecinos el alcalde de Bahia Blanca, que quedó sin luz y sufrió destrozos generalizados por vientos.
Luego de las fuertes ráfagas de viento que superaron los 100 km/h, se registraron cortes masivos de luz en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), con el objetivo de prevenir incidentes mayores en las viviendas.
El servicio meteorológico mantiene la alerta naranja.
El fuerte temporal causó grandes daños en gran parte de la ciudad y sus alrededores, entre ellos en el aeropuerto internacional Ministro Pistarini, en la localidad de Ezeiza, donde provocó roturas de techos, paredes y averías de distinta consideración en unos 16 aviones de Aerolíneas Argentinas.
Según las autoridades aeroportuarias, cerca de 100 vuelos tuvieron que ser cancelados para su partida y otros 32 para los arribos.
Se esperaba que en el transcurso de las horas fueran reprogramados los vuelos y que estos volvieran a la normalidad.
La misma situación de los vuelos sufrió el Aeroparque, cuya pista está en el centro de la ciudad, donde varios aviones tuvieron que ser desviados, algunos de ellos provenían de Bogotá, Colombia, y otros de Florianópolis, Brasil.
La violencia del temporal dejó sobre la pista restos de diferentes elementos, como ramas de distintos tamaños que fueron arrastrados por la fuerza del viento.
Agencias