Los conflictos bélicos y la menor producción de gas natural pasan factura a Bolivia. Las exportaciones nacionales sumaron $us 9.313 millones a octubre de 2023, un 21,6% menos que en el mismo mes del año pasado cuando registraron $us 11.776 millones, según el último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE). Esta situación presiona las Reservas Internacionales Netas (RIN) que hasta agosto eran $us 2.147 millones, su nivel más bajo en 20 años.
“Para que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) sea tan bajo en 2023 -muy distante del 4,86% esperado- una de las explicaciones ha sido el derrumbe de las exportaciones”, advirtió el gerente general del Instituto Boliviano de Comercio Exterior, Gary Rodríguez.

Los bloqueos constantes, la caída de los precios internacionales, la tardía otorgación de cupos de abastecimiento y las rencillas políticas provocaron un descenso en las ventas externas.
La minería se pone en relieve y cabe mencionar que a octubre de 2023, se establece que el mayor superávit comercial registrado corresponde a suministros industriales, entre los que se destacan las exportaciones de oro y zinc.
En este sentido, los minerales también generan superávit comercial seguido de los agroproductos. Con India son $us 991,8 millones, destacando las ventas externas de oro, seguido de Emiratos Árabes Unidos, alcanzando los $us 780,8 millones por las exportaciones de oro, y Colombia con $us 755,3 millones por la oferta exportable de soya y sus derivados.
De enero a octubre 2023, las exportaciones nacionales llegaron a $us 9.231 millones, cifra menor en $us 2.545 millones a la registrada en similar período de 2022, cuando se alcanzó $us 11.776.9 millones lo que representa una disminución del 21,6%.
“Este comportamiento se explica por las variaciones negativas que registraron las actividades económicas: agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca, 30,1%; extracción de hidrocarburos, 31,3%; extracción de minerales, en 13,1%; e industria manufacturera, 20,2%. Las exportaciones de energía eléctrica, en este contexto, externo llegaron a $us 5,6 millones”, se precisó en el informe. Como se recordará, Bolivia tiene planes para vender electricidad a Argentina y Brasil y por ello, la oferta de generación casi duplica la demanda con inversiones millonarias.
Los productos que registraron variación negativa con respecto a similar período del año anterior son agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca, fueron la castaña, en 48,4%; semillas y habas de soya, en 36,7%; y bananas, en 4,4%. Sin embargo, las ventas externas de semillas de girasol se incrementaron en 52,3%, chía en 23,6% y quinua un 13,3%.
Este año, el Gobierno boliviano tuvo que renegociar contratos por la venta externa de gas natural a Argentina y Brasil, entonces en el período analizado, las exportaciones de productos procedentes de la extracción de hidrocarburos muestran una reducción, la que se explica por el descenso del 31,7% de la venta de gas natural.
En abril se proyectaba un crecimiento de la demanda mundial de zinc superando la oferta en 2023, según el Grupo Internacional de Estudios sobre el Plomo y el Zinc. Así estimó la demanda mundial de zinc refinado que supere a la oferta en 45.000 toneladas. Sin embargo, las ventas externas de productos de la extracción de minerales presentaron variaciones negativas, explicada principalmente por el mineral de zinc con 28,2%, en comparación a similar período de 2022. Contrariamente, se incrementaron las exportaciones de mineral de antimonio en 30,1%.
Caída en ventas de estaño y derivados de soya
El descenso. Las exportaciones de los principales productos de la actividad de industria manufacturera que registraron una disminución fueron el estaño metálico en 27,4%; los productos derivados de soya en 23%; y oro metálico en 11,4%, respecto al mismo período anterior.
Fernando Romero, presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), había anticipado que la cadena oleaginosa por exportaciones de grano, aceite y harina de soya ha generado cerca de $us 1.400 millones a septiembre de 2022, cifra menor en 27% en contraste con el mismo periodo de 2023. El resultado llama la atención cuando hubo un aumento de la producción. «En 2023 se logró una producción total de 3,2 millones de toneladas, cantidad superior en 5% con relación a 2022, debido a mejores condiciones climáticas en la campaña de invierno que aumentaron la productividad promedio de ese ciclo agrícola, de 1,73 toneladas métricas por hectárea (TM/ha) a 2,13 TM/ha», precisó el dirigente.
El Deber