La Marcha Indígena llegó la tarde de este miércoles hasta el noveno anillo de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra. Lo hizo tras 36 días de caminata y sin una respuesta del Gobierno central para instalar un diálogo que atienda sus demandas, entre ellas frenar los presuntos «avasallamientos» a sus tierras.

Se prevé que la comitiva llegue este jueves a plaza 24 de septiembre, donde se instalará un el Parlamento Indígena que definirá el pliego de demandas, confirmó este miércoles el dirigente Marcial Fabricano.
Mediante una carta, los indígenas solicitaron una reunión con autoridades del Gobierno. Se prevé que en este encuentro la comitiva informe sobre los 14 puntos establecidos en su agenda nacional.
No obstante, hace un par de días el viceministro de Autonomías, Álvaro Ruiz, calificó como «política» la movilización y desconoció a sus dirigentes.
En ese contexto, aseguró que el Gobierno dialoga con representantes de la Confederación de Pueblo Indígenas del Oriente Boliviano (Cidob) para llegar a un acuerdo por el tema de tierras cuyo acuerdo se conocerá a principios de octubre.
Los indígenas de las tierras bajas emprendieron su caminata rumbo a la capital cruceña el 25 de agosto desde Trinidad, Beni. Hoy retomaron su caminata desde Cotoca donde participaron en una misa.
Pedido de diálogo
El 27 de septiembre, la marcha envió cartas de convocatoria al diálogo a la Presidencia y la Vicepresidencia para que el presidente Luis Arce y el presidente nato de la Asamblea Legislativa David Choquehuanca asistan a una reunión con los indígenas movilizados este 30 de septiembre.
“La Marcha por el territorio, identidad y cultura y el Parlamento de las Naciones indígenas de la Amazonía , Oriente y Chaco de Bolivia, solicitamos a su autoridad, una reunión en la ciudad de Santa Cruz el día jueves 30 de septiembre de 2021 a horas 10:00, en la pastoral social de la Iglesia Católica, a finde viabilizar el cumplimiento de los derechos indígenas establecidos en la C.P.E. y los convenios internacionales, debidamente homologados en el país”, señala un parte de la carta dirigida a Arce.
Mientras que en la misiva a Choquehuanca se lee: “Las 34 naciones de pueblos indígenas de tierras bajas de Bolivia hemos llegado al límite con la destrucción de bosques, los incendios forestales, la invasión y avasallamiento en nuestros territorios y los proyectos extractivitas, que para unos es desarrollo, para nosotros es destrucción. Ya no hallamos con qué sustentarnos y sentimos que es el tiempo de cambiar las políticas extractivas y desarrollistas del país, que agudizan la extrema pobreza en nuestros pueblos y significa destrucción de la madre naturaleza; usted como indígena entiende que no se puede vivir destruyendo a la naturaleza y a otros seres vivos”.
Las invitaciones también fueron cursadas al presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Oscar Hassenteufel, y al presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Ricardo Torres.
Página Siete