En menos de una semana, dos privados de libertad fueron asesinados en Bolivia. Uno de ellos cumplía sentencia en el penal de Chonchocoro de La Paz y el otro en Morros Blancos de Tarija.
El último caso involucra a José A.C., quien sufrió quemaduras de tercer grado en el 70% de su cuerpo el 11 de diciembre, alrededor de las 21:30. Según información policial, el privado de libertad estaba condenado por un asesinato ocurrido en Potosí y se encontraba en la celda 9 del pabellón de máxima seguridad de Morros Blancos. La víctima fue trasladada al Hospital San Juan de Dios, donde falleció durante la madrugada del 12 de diciembre, alrededor de la 01:00. Antes de su muerte, logró proporcionar los apodos de dos internos, señalándolos como los responsables de su muerte.
El otro asesinato ocurrió el lunes 9 de diciembre en el penal de Chonchocoro, el cual es considerado el de máxima seguridad en Bolivia.
Kevin Javier C.R., quien cumplía una sentencia de 18 años por secuestrar a una pareja en el municipio de Uyuni en 2018, murió debido a lesiones provocadas por un arma punzocortante en el abdomen y el tórax. Dos internos están siendo investigados por este crimen.
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