El militar del Ejército boliviano que era buscado por su presunta implicación en la muerte de su camarada fue hallado sin vida el domingo en el municipio paceño de Huarina. El cuerpo presentaba un impacto de bala en la cabeza, según el informe de la Fiscalía Departamental de La Paz.
“Luego de la autopsia de ley se ha podido establecer que esta persona se ha suicidado. Se habría dado un disparo en la cabeza causando la muerte”, informó el fiscal departamental Luis Carlos Torres.
El militar fallecido, identificado como Jorge L. C. Q., de 34 años, se encontraba prófugo desde que se emitió una orden de aprehensión en su contra por estar vinculado con la muerte de su camarada, Julio A. CH., de 30 años, quien recibió dos disparos: uno en la cabeza y otro en la pierna.
El hecho ocurrió el 24 de mayo, durante una presunta discusión entre ambos efectivos en la Escuela Militar de Topografía del municipio de Huarina.
Las investigaciones preliminares de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) revelaron la presencia de una tercera persona en la escena del crimen. Se trata de una mujer, quien sería la expareja del presunto autor del disparo.
Según el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de La Paz, coronel Gabriel Neme, el asesinato se habría desencadenado luego de que el sospechoso se enterara de que su expareja había iniciado una nueva relación con la víctima. “Tras un altercado, el militar usó su arma reglamentaria y disparó contra su camarada”, detalló.
Tras cometer el crimen, el militar acusado había huido del lugar. Inmediatamente, las fuertes policiales iniciaron una búsqueda en su contra.
La Policía y el Ministerio Público continúan con las investigaciones para esclarecer los detalles del caso y determinar si hubo encubrimiento o complicidad por parte de terceros.
El Deber
