Del Castillo sale al frente otra vez para dar ideas y queda expuesto ante detractores

Otra vez, el exministro de Gobierno y candidato presidencial por el Movimiento Al Socialismo (MAS), Eduardo del Castillo, salió al frente para plantear ideas ante la crisis económica.
En su afán de resaltar ante sus competidores, Del Castillo planteó congelar los pagos crediticios ante las entidades financieras, de manera que los prestatarios no abonen capital ni intereses hasta el 31 de diciembre de la gestión en curso.
El exministro presentó en la Asamblea Legislativa Plurinacional el proyecto normativo denominado Diferimiento Excepcional de Créditos y les pidió a los asambleístas que lo aprueben con urgencia. La oposición salió en bloque a criticarlo. El diputado Alberto Astorga, de Comunidad Ciudadana (CC), dijo que el candidato masista actúa con “mucho cinismo”.
“Es mucho cinismo. Ha estado cuatro años y medio en el poder. ¿Por qué no lo ha hecho cuando ha sido ministro?”, cuestionó.
La diputada “evista” Gladis Quispe también desmereció la propuesta. “Los diferimientos han sido un error garrafal desde la pandemia. Gracias a este diferimiento las entidades están atentando contra sus casas, contra sus bienes, sus vehículos, que les ha costado tantos años a nuestros hermanos adquirir”.
Distinto lo tomó el diputado “arcista” José Luis Flores, quien adelantó que en la Asamblea apoyarán toda iniciativa que beneficie a los bolivianos. Hace unos días, Del Castillo le planteó al presidente Luis Arce que presione al Banco Central de Bolivia (BCB) para que, mediante labores coordinadas con otras instituciones, el país perciba una inyección de más de 1.000 millones de dólares.
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