Templo Palaspata: un nuevo descubrimiento arqueológico en Bolivia

Un grupo de arqueólogos realizó una investigación sobre Palaspata, un importante complejo ceremonial de la cultura Tiwanaku, ubicado en la cima de una colina del altiplano boliviano. El templo no había sido explorado previamente por la arqueología pese a ser conocido por comunidades indígenas locales.
Las conclusiones se publicaron en la revista Antiquity. Investigadores de la Universidad Estatal de Pensilvania, en colaboración con arqueólogos bolivianos, identificaron un templo ceremonial hasta ahora desconocido, lo que representa un paso importante en el entendimiento de esta cultura preincaica que floreció hace más de mil años cerca del lago Titicaca.
La investigación mostró que la estructura monumental del templo es de de 125 por 145 metros. Además, cuenta con quince recintos rectangulares distribuidos alrededor de un patio central.
El hallazgo se ubica a unos 200 kilómetros al sureste del centro arqueológico principal de Tiwanaku, cerca del lago Titicaca, y representa un avance clave para entender cómo esta antigua civilización organizaba y controlaba las rutas comerciales que enlazaban las tierras altas con los valles orientales hace más de un milenio.

¿Qué significa este hallazgo?
Según José Capriles, profesor asociado de antropología de la Universidad Estatal de Pensilvania y autor principal de un estudio, la sociedad Tiwanaku colapsó alrededor del año 1000 d. C. y estaba en ruinas para cuando los incas conquistaron los Andes en el siglo XV.
En el apogeo tiwanaku, la sociedad contaba con una estructura social organizada, en sus restos, se evidenció monumentos arquitectónicos como pirámides, templos con terrazas y monolitos.
«Si bien sabemos que el control y la influencia de Tiwanaku se extendieron mucho más allá, los académicos debaten cuánto control real tenía sobre lugares distantes”, contó para National Geographic. La mayoría de restos de la civilización se encuentran distribuidos a los alrededores del lago Titicaca.
Este nuevo sitio arqueológico ofrece pistas valiosas sobre la expansión y organización del estado tiwanacota. Según los investigadores, su localización no fue fortuita: Palaspata se encontraba en un punto estratégico donde confluían tres ecosistemas claves —el altiplano, las estepas secas y los valles fértiles de Cochabamba—, lo que lo convertía en un centro clave de intercambio comercial, peregrinación religiosa y articulación territorial.
Según los expertos, la orientación de este templo sugiere que fue diseñado para llevar a cabo rituales después del equinoccio solar, cuando el Sol se posiciona justo sobre el ecuador. Su diseño recuerda claramente a las construcciones escalonadas con patios hundidos, característicos del estilo arquitectónico de Tiwanaku, como se observa en el reconocido templo de Kalasasaya.
Capriles, según recoge National Geographic, sugirió que el templo probablemente tenía un propósito religioso.
«Como lo evidencian las áreas rituales designadas, así como su conexión física que mediaba en el comercio y la distribución de las cosechas. La mayoría de las transacciones económicas y políticas debían mediarse a través de la divinidad, ya que esta constituiría un lenguaje común que facilitaría la cooperación entre diversas personas, ya que la religión era a menudo el punto en común que conectaba a los diferentes grupos”, concluyó.
El Deber