Sujetos robaron y golpearon a vecino de la Loma de San Juan en Tarija

Mientras la mayoría de los vecinos celebraban la verbena por el aniversario del barrio La Loma de San Juan, la madrugada del martes 24 de junio escondía una escena oscura, brutal y casi fatal. Eran las 4:00 de la mañana cuando un vecino de 48 años, decidió emprender camino hacia su domicilio, ubicado en la intersección de las calles Hugo López Dollz y Aurelio Arce, frente a la avenida Cochabamba. A unas cuadras de su casa, según relata la denuncia presentada un día después, fue interceptado por un grupo de cinco sujetos.
A la cabeza del ataque, de acuerdo al testimonio del denunciante y del presidente del barrio, Franz Gelman Meriles —quien presenció parte del hecho—, estaba sujeto ya identificado, un nombre que ahora resuena entre los vecinos con rabia contenida y temor.
La víctima fue golpeada con saña. Sin mediar palabra, le cayeron encima. Puños, patadas, insultos. Le dañaron la cabeza, le arrancaron una muela, le fracturaron las costillas hasta dejarlo sin aliento y con dificultad para respirar.
“Si no hubiera llegado Franz (presidente del barrio) a tiempo… hoy estaríamos velando un cadáver”, dijo uno de los testigos que vio cómo el sindicado y los demás huían tras dejar a la víctima tirado en el suelo, inconsciente y despojado de su celular y sus llaves.
La calle amaneció con sangre y un barrio dividido entre el miedo y la indignación. Porque los agresores —salvo el delincuente, que ya se sabe quién es— aun caminan libres, impunes, y los vecinos temen que vuelva a ocurrir. “No fue una pelea de borrachos, fue una emboscada”, dijeron.
El caso fue asignado a una sargento de la Felcc, quien deberá investigar si el ataque tenía móviles personales o fue simplemente un acto de violencia descontrolada producto del alcohol y la impunidad que muchas veces cubre a estos grupos de “pandilla de barrio”, como los llaman los vecinos.
Agencias