Exvocales: ni votos blancos ni votos nulos influyen en la asignación de escaños

Exvocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) explican que, en las próximas elecciones nacionales del 17 de agosto, los votos nulos y blancos, aunque deben ser registrados, no afectan la asignación de escaños en las circunscripciones uninominales y plurinominales, debido a que esta distribución se realiza sólo con los votos válidos emitidos a favor de candidatos.

“Los votos blancos y nulos no afectan a ninguno. La votación para plurinominales depende de la votación presidencial y la uninominal es una votación directa, y tanto en la presidencial como en la uninominal se van a presentar blancos y nulos, pero no se toman en cuenta. No va a surtir ningún efecto real cuando se tenga que hacer la asignación de los escaños”, aseveró el expresidente del TSE, Antonio Costas.

En Bolivia, la elección de uninominales y plurinominales tiene mecanismos diferentes pero convergen en que solo los votos válidos determinan la asignación de cargos. De acuerdo con la exvocal del TSE, María Angélica Ruiz, los votos nulos y blancos solo se cuentan para fines estadísticos.

“Democráticamente, el voto nulo y blanco solamente se cuenta para fines estadísticos, (y aunque) es verdad que es un índice de democracia. En nuestro sistema lo que se computa y establece escaños, y se establece quién es presidente o no, es en base a los votos válidos solamente”, remarcó.

El artículo 161 de la Ley N°026 de Régimen Electoral establece que “el voto blanco o nulo para un nivel de representación o gobierno, no afectará al voto de otra franja o nivel de representación o gobierno, de la misma papeleta”. 

La exvocal del TSE Dunia Sandoval señala que, si bien el voto nulo y el blanco no son válidos, ni se toman en cuenta para definir ganadores en una elección, si existe un mayor porcentaje de estos fortalecen a quienes sí reciben apoyo con votos válidos.
“Si hay bastantes votos blancos y nulos, digamos, un 20% por decir, el porcentaje de votos válidos se achica, y necesitas menos votos válidos para tener un porcentaje. Hay varios que han dado ejemplos numéricos de eso”, manifestó.

No obstante, el exvocal Costas remarcó que estos votos nulos y blancos siempre tuvieron un bajo porcentaje en las elecciones y descartó que esa tendencia cambie en estas elecciones, pese a la campaña emprendida desde sectores evistas.

Votos inválidos desde 2002

En las últimas dos décadas de elecciones nacionales en Bolivia, los votos nulos y blancos siempre representaron una minoría frente a los votos válidos emitidos, y en ningún caso superaron el 8% al sumarse ambos.

En las elecciones generales de 2002, el 92,81% de los votos fueron válidos, mientras que los votos nulos alcanzaron el 2,82% y los blancos el 4,36%. En los comicios de 2006, se registró una proporción similar: 92,63% de votos válidos, con 3,37% de nulos y 3,99% de blancos.

Para 2009, la participación con votos válidos aumentó ligeramente a 94,31%, mientras que los votos nulos bajaron al 2,48% y los blancos al 3,22%. En las elecciones de 2014 se mantuvo la misma tendencia, con 94,24% de votos válidos, aunque se registró un leve incremento en los votos nulos con 4,02% y una reducción en los blancos con 2,09%.

Carga política

De acuerdo con los exvocales, aunque los votos nulos y blancos no tienen un peso legal porque no se toman en cuenta para definir a los ganadores ni afectan la distribución de escaños, tienen una carga política. 

La exvocal María Ruiz advirtió que, en regímenes autoritarios o altamente caudillistas, el uso discursivo del voto nulo puede escalar negativamente. Según su criterio, aunque la ley no establece que estos votos tengan consecuencias prácticas, algunos sectores podrían manipular su presencia para deslegitimar el proceso electoral o justificar un discurso de ruptura institucional.

“Este tema podría manipularse, para legitimar actos subversivos, por ejemplo, como la mayoría no votó por usted y demás, entonces hay vía libre para tomar las calles, las cuestiones y el poder por el pueblo. Un régimen anárquico que también es totalmente antidemocrático. Son totalitarismos, tanto la dictadura como la anarquía y ambos son antidemocráticos”, enfatizó Ruiz.

CAMPAÑA DEL EVISMO

Voto nulo
En el contexto actual, sectores vinculados al evismo emprendieron una campaña para promover el voto nulo en las elecciones nacionales de 2025, con el objetivo de atribuir estos a un supuesto descontento por el rechazó de la candidatura de su líder, el expresidente Evo Morales.

Rechazan excesos
Desde el ala evista también surgieron propuestas de organizar “células de reacción” para “quemar ánforas”, ante ello el TSE aclaró que instigar a quemar ánforas constituiría un delito.

El Deber