La justicia boliviana ordenó la detención preventiva en la cárcel de Obrajes para la niñera acusada de agredir brutalmente a un niño de dos años en el municipio de Tipuani, al norte del departamento de La Paz. La decisión se asumió luego de que el menor falleciera en la madrugada de este jueves, lo que llevó a agravar el tipo penal de investigación en contra de la imputada.
“El juez toma la determinación en base a los indicios y a las valoraciones que se le presentaron”, informó el coronel Javier Salgueiro, comandante de la Policía Rural y Fronteriza.
El pequeño había sido internado en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital del Niño, en La Paz, con un diagnóstico de muerte cerebral. Según el director del nosocomio, Alfredo Mendoza, el niño llegó en estado crítico tras recibir un fuerte golpe en la cabeza.
“Desde su ingreso tenía gran riesgo de fallecimiento y desafortunadamente su organismo no ha resistido más. Ha fallecido hoy (jueves) a las 2 de la mañana”, explicó Mendoza.
El médico detalló que, además del traumatismo cráneo encefálico, el menor presentaba desnutrición crónica, deshidratación severa, problemas pulmonares e insuficiencia respiratoria. Un electroencefalograma confirmó la muerte cerebral.
El caso se complica aún más tras conocerse que los dos hermanos de la víctima también presentaban lesiones físicas.
“Los otros dos hijos que estaban al cuidado de la misma señora fueron valorados por el médico forense, y se determinó que también tenían lesiones”, indicó Salgueiro.
El padre del menor también es investigado, luego de que la Policía encontrara contradicciones en sus declaraciones. Fue aprehendido y espera su audiencia cautelar.
La niñera, inicialmente con arresto domiciliario, fue trasladada al penal de Obrajes tras la audiencia de medidas cautelares, mientras la Fiscalía amplía la investigación.
El Ministerio Público informó que se analiza la posible comisión de infanticidio y violencia infantil, además de otros delitos que pudieran surgir a medida que avancen las pericias.
El Deber
