Estudiante dice que Quelali la amenazó con expulsarla de la U

La estudiante Karen Apaza que se animó a romper el silencio y presentar un memorial contra Álvaro Quelali -el dirigente más poderoso de la Federación Universitaria Local (FUL) de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA)- vivió un infierno. La joven denunció que el acusado la amenazó con expulsarla de la “U” o hacer desaparecer sus notas si ella continuaba con el proceso, según la imputación formal del Ministerio Público.
“(…) En relación de la estudiante Karen Apaza, quien mediante memorial de fecha 19 de septiembre de 2022 denuncia estar siendo amenazada (por Quelali) con ser expulsada de la universidad o hacer desaparecer sus notas si sigue con el proceso”, se lee en la imputación formal, documento al que tuvo acceso Página Siete.
El dirigente universitario fue aprehendido el martes luego de dar su declaración ante la Fiscalía. Fue enviado ayer de forma preventiva por dos meses a la cárcel de San Pedro después de una audiencia cautelar que duró al menos cuatro horas.
Quelali -que es imputado por el delito de conducta antieconómica- fue denunciado por usar fondos de la “U” para pagar viajes de su hermano Sergio Quelali al interior y el exterior del país, cuando los viáticos se deberían entregar a alumnos destacados.
La Fiscalía solicitó la detención preventiva porque “el imputado tiene las facilidades de amenazar o influir negativamente sobre las víctimas y los testigos del caso (con la finalidad) de que informen falsamente o se comporten de manera reticente a la investigación”, según la imputación formal.
Además, el Ministerio Público puso como un ejemplo la situación de la estudiante Karen Apaza, quien indicó que recibió amenazas de parte del dirigente universitario.
La fiscal del caso, Magalí Bustamante, informó ayer que en la audiencia cautelar presentaron como indicios las notas (las resoluciones) en las que el acusado solicitaba la utilización de los recursos del IDH para solventar viáticos de estudiantes al exterior e interior del país, uno de ellos fue su hermano Sergio.
En total, las autoridades investigan tres viajes, dos se realizaron al exterior: La Habana (Cuba) y Venezuela. Uno se registró en Tarija.
La representante del Ministerio Público informó -además- que la investigación del caso se amplió por el delito de uso indebido de influencia.
Según la fiscal, por este caso también se investiga a Sergio, hermano de Quelali. La autoridad del Ministerio Público indicó que él ya fue convocado y dio su declaración.
La Fiscalía anunció que convocará a los otros estudiantes que viajaron a los tres destinos. Se revisará si cumplían con el requisito de excelencia académica.
En la imputación formal contra Quelali están como denunciantes la universitaria Apaza, el diputado Héctor Arce y el rector de la UMSA, Óscar Heredia.
La defensa sostuvo que el acusado es inocente. “Ha sido difamado (…) Llegaremos a la verdad”, sostuvo Diego Quelali, hermano y asesor legal del imputado, en contacto con los medios en las instalaciones de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc).
Quelali es catalogado como otro de los “dirigentes dinosaurio” porque lleva 20 años como universitario de la UMSA. Fue además reelecto supuestamente de forma irregular en tres gestiones, cada una de tres años. En su última administración ya tiene un año. Según datos que proporcionó la universidad, Quelali ingresó el año 2002 y cumplió su plan de estudios en 2015 en la carrera de Matemáticas, pero hasta la fecha no sacó su título.
Entre 2014 y 2015, Quelali hizo una carrera paralela en ciencias químicas. Luego la dejó. En 2016 se inscribió en Informática y hasta la fecha sigue en la misma. Es decir que es universitario durante 20 años.
Fue identificado -además- como uno de los brazos operativos de Max Mendoza, exdirigente y expresidente de la CUB, quien en la actualidad guarda detención preventiva en el penal de San Pedro.
Los antecedentes
Manejo En mayo, Página Siete publicó: Quelali, el poderoso dirigente de la FUL, maneja al menos 4,2 millones de bolivianos al año. Según la nota, el estudiante contaba con un vehículo; además antes podía contratar personal y distribuir becas comedor a sus allegados.
Nexos Quelali fue identificado como uno de los brazos operativos de Max Mendoza.
Página Siete