El paro indefinido en Santa Cruz y el rol que juega el gobernador Luis Fernando Camacho en esa medida logran la unidad del Movimiento Al Socialismo (MAS), aunque de manera circunstancial, según los analistas. Autoridades y representantes del partido azul señalaron que no permitirán que los mismos actores del supuesto “golpe” de 2019 desestabilicen hoy al Gobierno.
Luego de intensas pugnas, las corrientes del MAS empezaron a cerrar filas desde la semana pasada. Aquello ocurrió en el “cabildo del pueblo” en Santa Cruz, concentración que rechazó el paro indefinido y respaldó el plan del Gobierno sobre el censo. En esa cita, se vio juntos al Bloque Oriente, a parlamentarios evistas, renovadores y a los altos dirigentes de la Central Obrera Departamental, de los campesinos y de los interculturales.
Ayer, el presidente Luis Arce y el líder del MAS, Evo Morales, participaron en la inauguración del congreso de la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesino de Cochabamba. El mandatario expresó que los sectores del movimiento campesino y popular detendrán cualquier aventura golpista. Por su parte, el titular del partido instó a tomar medidas “para frenar esa agresión de algunos grupos de Santa Cruz”.
“En el MAS hay diferentes corrientes, pero la lucha en las calles nos une. Camacho no se ha dado cuenta que su intransigencia y su paro, nos están uniendo. Esto de la unidad es por nuestro proceso”, dijo Carlos Nina, líder de Generación Choquehuanca.
El secretario político del MAS, Froilán Fulguera, indicó que no permitirán que Camacho imponga su voluntad. Agregó que la autoridad cruceña incita a tomar medidas de presión y rechaza dialogar para tapar su mala gestión.
“Tenemos que ver cómo ayudar políticamente ante estas adversidades que están pasando con el paro en Santa Cruz. Vemos que es una majadería de un gobernador que se quiere imponer. Ha habido mucha intransigencia, han habido muchas reuniones de los ochos departamentos, pero un solo gobernador se quiere imponer”, sostuvo.
El senador oficialista Félix Ajpi declaró que el Gobierno mostró su disposición para dialogar, y que la posibilidad aún esta abierta. “La unidad está en torno a la cabeza de Luis Arce, pero hemos visto que Camacho y los cívicos fueron a confrontar a la mesa de diálogo y no dar una solución”, expresó.
¿Camacho funcional?
Rolando Schrupp, analista político, afirmó que el paro en Santa Cruz responde a la soberbia del Gobierno. Recodó que en la mesa de diálogo del pasado sábado, tanto Camacho como los representantes del Ejecutivo no tenían la intención de llegar a una solución.
“Ministros como Eduardo Del Castillo y María Nela Prada están haciendo que el conflicto escale, porque tienen discursos incendiarios, mueven grupos de choque (…). Hay un choque de posturas de la dirigencia estatal y la dirigencia de la Gobernación, ninguno busca una solución, quieren solo capitalizar emociones. La mayoría tiránica nacional y la mayoría tiránica regional buscan la forma de someter una a la otra”, enfatizó.
Schrupp manifestó que tanto Camacho como el Gobierno buscan con el paro capitalizar adeptos. Aseguró que esto responde a que el Ejecutivo como la administración departamental tienen una gestión ineficiente, y con estos conflictos distraen la atención de la población, porque el censo no está en el fondo de la discusión política.
“Los arcista han preferido este conflicto para unificar el liderazgo de Arce, en contra de un funcional Camacho, que baila al ritmo que le ponen (…). No se discute el censo, sino posiciones mezquinas, esto les beneficia a populistas como Arce y Camacho, porque distraen la atención de los verdaderos problemas de gestión, estamos en una farándula política”, puntualizó.
El politólogo Carlos Cordero aseveró que Camacho con este tipo de conflictos solo busca fortalecer su liderazgo regional, pero no logra una proyección nacional. Argumentó que la figura del gobernador solo causó una unidad momentánea en el MAS.
“Han habido partidos y personalidades que han unido a sus adversarios. Camacho produce una unidad al interior del MAS, al mismo tiempo su liderazgo solo se queda en una proyección regional. El tema del censo es un problema de coyuntura, por lo que tiene corto alcance y a mediano plazo volverá la crisis al interior del MAS”, subrayó.
Cordero adelantó que si no se logra adelantar la fecha del censo, el gobernador cruceño quedará consolidado solo como un figura a nivel regional, y Santa Cruz mostrará que no puede incidir políticamente a nivel nacional.
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DÍAS DE PARO
se cumplen hoy en Santa Cruz. No hay fecha de reanudación del diálogo.
Página Siete
