Los conflictos sociales en el sur de Perú, que se extienden desde hace más de dos meses, con bloqueos en las ciudades fronterizas con Bolivia, han dejado hasta la fecha pérdidas económicas por más de 350 millones de dólares por las exportaciones e importaciones paralizadas, informó ayer el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).

Los conflictos sociales estallaron en diciembre del año pasado tras la destitución de Pedro Castillo de la Presidencia y la posesión en el cargo de Dina Boluarte.
Las protestas, que arrancaron en diciembre tras el fallido autogolpe del expresidente Pedro Castillo (2021-2022), exigen la renuncia de la presidenta Dina Boluarte, el cierre del Congreso, adelanto de elecciones a 2023 y la convocatoria de una asamblea constituyente.
La gerente del IBCE, María Esther Peña, entrevistada por la red Unitel, señaló que cada día, como promedio, el país pierde 6 millones de dólares, por lo que en más de 50 días la suma es de 350 millones.
En la zona de Desaguadero, frontera con Bolivia, más de 450 camiones de transporte pesado permanecen varados, sin poder seguir su viaje a sus destinos ni regresar al país a causa de los bloqueos.
Unos 350 vehículos con carga lograron retornar al país gracias a una tregua que se dio en pasados días, sin embargo, los bloqueos de carreteras se reactivaron en al menos 20 puntos de las sureñas regiones de Puno y Apurimac, reducto de las movilizaciones que estallaron en diciembre de 2022 y se cobraron la vida de 70 personas, informó la agencia EFE.
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Los bloqueos, que en los últimos días se reportaron exclusivamente en la región de Puno, ubicada más de 1.200 kilómetros al sur de Lima, se extendieron este jueves también al departamento de Apurímac, afectando a un total de nueve vías nacionales.
Según la Defensoría, 48 personas han muerto durante los enfrentamientos con las fuerzas del orden durante las protestas, mientras que un policía perdió la vida al haber sido quemado vivo y otras 11 personas han muerto debido a los bloqueos de carreteras por parte de manifestantes.
SOYA
La gerente del IBCE informó que la zona de Desaguadero es una de las principales vías de ingreso y salida de productos bolivianos, por lo que los bloqueos en esta región provocan pérdidas millonarias, especialmente en lo que se refiere a la soya y sus derivados.
Peña cifró en al menos 150 productos los que se mueven cada año por el punto fronterizo de Desaguadero.
La gerente del IBCE afirmó, en declaraciones a Unitel, que el país necesita exportar lo que produce “para atraer divisas hoy más que nunca, también necesita comprar insumos, materias primas, bienes de capital para producir y luego exportar”.
Agencias
