Un ataque estadounidense con un avión no tripulado alcanzó ayer un vehículo que transportaba a “múltiples terroristas suicidas” de la filial afgana del Estado Islámico (EI) antes de que pudieran dirigirse a la evacuación militar en curso en el aeropuerto internacional de Kabul, informaron funcionarios estadounidenses, según Infobae.
“Llevamos a cabo un ataque aéreo contra una amenaza creíble en Kabul”, indicaron.
Un funcionario militar seña a la agencia AP que el ataque del domingo causó “importantes explosiones secundarias”, lo que indica la presencia de una cantidad sustancial de material explosivo en el vehículo.
Los informes iniciales indican que no hubo víctimas civiles causadas por el ataque aéreo, pero aún están evaluando los informes de cualquier otro daño colateral.
Se trata del segundo ataque aéreo que Estados Unidos lleva a cabo contra el grupo, que reivindicó el atentado suicida del jueves pasado en la puerta del aeropuerto de Kabul, en el que murieron 13 miembros del servicio estadounidense y decenas de afganos que luchaban por salir del país y escapar del nuevo régimen talibán.
El pasado sábado, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, había advertido que un nuevo ataque contra el aeropuerto de Kabul era “muy probable”.
“La situación en el lugar sigue siendo extremadamente peligrosa y la amenaza de un ataque terrorista en el aeropuerto sigue siendo alta”, escribió Biden en un comunicado. “Nuestros comandantes me informaron que era muy probable que se produjera un ataque en las próximas 24 a 36 horas”, agregó.
Pocas horas después, la embajada estadounidense en Kabul urgía a sus ciudadanos a alejarse del aeródromo “debido a una amenaza específica y creíble”.
A dos días del 31 de agosto, fecha límite para la retirada de Estados Unidos tras 20 años de guerra, las evacuaciones de aquellos afganos temerosos del nuevo régimen talibán empiezan a llegar a su fin en el aeropuerto Hamid Karzai.
Fuertemente armados, combatientes islamistas circulaban en los terrenos y edificios anexos al aeropuerto bajo la atenta mirada de marines estadounidenses ubicados en el techo de la terminal.
Los talibanes cortaron las carreteras hacia el aeropuerto y solamente permiten el paso a buses autorizados. Periodistas de AFP vieron una decena de autobuses descargar pasajeros en la puerta del aeropuerto.
A raíz del atentado, talibanes y estadounidenses estrecharon su colaboración. “Tenemos listas de los estadounidenses (…), si está en la lista, puede atravesar”, dijo a AFP un responsable talibán.
BIDEN RECIBE RESTOS DE LOS 13 MILITARES
En medio del silencio sólo interrumpido por el llanto de los deudos, Joe Biden recibió ayer los restos de los 13 militares estadounidenses muertos en un ataque en Kabul, una ceremonia difícil para un presidente criticado por su gestión de la crisis afgana.
Uno tras otro los ataúdes fueron depositados en la pista del aeropuerto de la base militar de Dover, Delaware, delante del presidente y su esposa Jill.
Con la mano en el corazón, el presidente observó el descenso de cada uno de los ataúdes transportados por los soldados hacia vehículos oscuros, a veces agachando la cabeza en signo de meditación.
Agencias