Un médico de 45 años encargaba a una adolescente de 15 años que captara colegialas a quienes ofrecía sus servicios gratuitamente para después abusar y violar de ellas. Tras cometer el delito, les entregaba dinero y amenazaba para que callaran

El caso se descubrió el jueves. Una madre había ido a la unidad educativa de su hija de 13 años a recoger unas ollas que dejó tras una actividad. Eran aproximadamente las 11:00 y su hija no estaba en clases. Nadie le supo decir dónde estaba hasta que una alumna la avisó que se la había llevado Carmen (nombre ficticio) y otra agregó que habían ido a donde un señor que vive por Tintamayu.
Una de las menores de edad le contó que allí vivía un señor que recibía a colegialas a quienes pagaba entre 10 y 30 bolivianos por dejarse manosear, según el informe de la jueza del Juzgado Anticorrupción, de Instrucción y Violencia contra la Mujer 1° de Sucre, Aurora Lazarte.
LA DENUNCIA
Con estos antecedentes, la madre presentó la denuncia en la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, que junto a la Policía organizó un operativo para detener al sospechoso.
El médico fue aprehendido en su casa y, en el proceso, llegaron tres adolescentes con sus uniformes de colegio para entrevistarse con el sujeto quien, supuestamente, las ayudaba y brindaba orientación.
VIOLACIONES
En las primeras indagaciones de la Policía, se estableció que el hombre también pagaba entre 100 y 200 bolivianos a las adolescentes que mantenían relaciones sexuales con él. Estos pagos los hacía delante de otras adolescentes con el fin de inducirlas a ceder a sus depravadas pretensiones sexuales.
El médico no trabaja en el sistema público y su actividad estaba ligada al ámbito privado, dijo la secretaria municipal de Desarrollo Social y Humano de la Alcaldía de Sucre, Marisol Llanos.
Llanos puntualizó que en contra de este sujeto pesen dos denuncias de violación y otras dos de abuso sexual, pero está a la espera de que una quinta víctima que vive en Padilla también presente su denuncia. No se descarta que pudiera haber más víctimas, acotó.
AMENAZAS
Lazarte afirmó que el hombre, luego de efectivizar el pago, siempre amenazaba a las adolescentes señalando que podía hacerles cualquier cosa, que conocía sus casas, que sabía a qué colegio iban y que les hacía un seguimiento.
DETENIDO
El médico acusado de abuso y violación fue enviado a la cárcel San Roque con detención preventiva por cinco meses este sábado; alegó que solo ayudaba económicamente a las adolescentes porque no tenían para su material escolar y que las llevaba en moto hasta sus casas cuando no podían pagar su pasaje.
Correo Del Sur