Se trataba de una especie de licorería dentro de una cárcel. Este jueves, la Policía ejecutó un operativo en el penal de máxima seguridad de Palmasola, en Santa Cruz, y halló una “cantidad enorme” de alcohol, cerveza y drogas que eran comercializados entre los reclusos.

El director nacional de Régimen Penitenciario, Juan Carlos Limpias, identificó a Roberto Paredes y Yamil Algarañaz como los responsables de este negocio.
Pero se cree que hay otros miembros de este clan. “Se está investigando a otros posibles cómplices que también ya se los tiene identificados y se los está separando”, dijo.
Pero además se indaga a dos grupos de custodios de la fuerza del orden que trabajan en el ingreso al penal y en una sección.
“Por la cantidad enorme que se ha ingresado de alcohol se está poniendo a disposición del personal de seguridad que está trabajando en el sector la puerta, PC1. Ambos grupos van a ser sometidos a investigaciones
En ese contexto, Limpias advirtió: “Vamos a realizar este tipo de trabajo absolutamente en todos los centros penitenciarios de Bolivia”.
Hace algunas semanas, se ejecutó un similar operativo en San Pedro, de La Paz, y se hallaron similares productos. No es la primera vez que se detectan este tipo de irregularidades en los penales del país.
Página Siete
