El pasado 30 de junio, hallaron el cuerpo sin vida de Edgar Paco en la zona de San Roque de El Alto, su familia acusa a dos de sus cuñados, quienes pertenecen a la Policía Boliviana, de ser los autores del crimen. El móvil sería una herencia familiar.
Paco trabajaba como taxista, murió tras recibir nueve puñaladas en diferentes partes de su cuerpo. Según la familia de la víctima, estaba en disputa un taxi y una casa.
Los policías pretendían quedarse con esos bienes de la víctima. Un juez decidió enviar a ambos con detención preventiva por cuatro meses a la cárcel de San Pedro, en La Paz.
El caso es investigado por el delito de asesinato. La familia exige 30 años de cárcel para los autores.
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