Los casos globales de Covid-19 registrados desde el inicio de la pandemia superaron ayer la barrera de los 200 millones de contagios, aunque la curva de nuevas infecciones muestra indicios de estabilización sin haber alcanzado los records de la anterior oleada, el pasado mes de abril.

Según las estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), los muertos en la pandemia ascienden a 4,2 millones, 45.000 de ellos en lo que va de semana, y se espera que finalmente haya un descenso respecto a los 64.500 de la semana anterior.
Los nuevos casos semanales van en aumento desde mediados de junio, mientras que los fallecimientos bajaron en la pasada semana, después de tres aumentos semanales consecutivos.
Aunque las cifras son altas, mueve al optimismo el ligero descenso de casos semanales registrado desde finales de julio en Europa y América, las dos regiones más golpeadas, aunque estos siguen en aumento en Asia.
La curva baja desde hace días o incluso semanas en algunos de los países con más casos absolutos, como Brasil, Argentina, Colombia o España, pero se mantiene estable o en ligera alza en otros como EEUU, India, Rusia, Francia, Italia o Irán.
También invita a la esperanza el ritmo de vacunación: casi un 30 por ciento de la población mundial recibió ya al menos una dosis (aunque en los países de bajos ingresos el porcentaje apenas supera el 1 por ciento), y más de un 15 por ciento está completamente vacunado.
EFE
