Respondiendo a las denuncias de algunos sectores, el viceministro Franz Apaza habló ayer sobre los alcances del proyecto de ley 350, cuyo objetivo es aumentar el monto de la Pensión Solidaria de Vejez, desmintiendo que la norma tenga la intención de implementar una jubilación obligatoria.

“Algunos dirigentes de algún sector vienen diciendo de que el Gobierno quiere implementar una jubilación obligatoria a los 65 años, y eso es lo que queremos desmentir, porque en el proyecto de ley claramente se establece que esta es una opción”, afirmó.
La aclaración surge a raíz de las interpretaciones vertidas por representantes de médicos y maestros.
La autoridad enfatizó que en el proyecto de ley se establece que los trabajadores de 65 años de edad podrán someterse a un examen médico, con el fin de verificar su estado físico y mental para seguir desempeñando su labor.
“Este proyecto de ley está colgado en la página web de la Asamblea y cada uno se puede cerciorar de que no es una jubilación obligatoria, como se está pretendiendo lamentablemente desinformar a la población”, afirmó Apaza.
El Viceministro destacó que el proyecto busca mejorar los límites de la Pensión Solidaria de Vejez, y un financiamiento que garantice su sostenibilidad en el largo plazo, beneficiando sobre todo a aquellos trabajadores que tienen salarios bajos “y que probablemente en sus años de vida no han podido acumular un fondo suficiente para tener una jubilación digna”.
Resaltó que con la norma actual un trabajador con más de 35 años de aportes podría llegar a tener una Pensión Solidaria de 4.200 bolivianos, pero con el proyecto de ley se aumenta 1.000 para llegar a 5.200.
Para sostener el aumento, el proyecto propone incrementar el aporte patronal y de los trabajadores que ganan más de 13.000 bolivianos, para el Fondo Solidario.
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