El incendio forestal en la zona de Trancas, al norte de la serranía de Sama, en el municipio de San Lorenzo (Tarija), arrasó con 1.200 hectáreas, aproximadamente, según reporte preliminar de la Gobernación.
En el lugar se quemaron pastizales secos, en su mayoría, durante los casi dos días.
El director de Gestión Ambiental y de Riesgos de la Gobernación de Tarija, Reiner Figueroa, confirmó a EL DEBER que el incendio fue controlado en su totalidad, incluyendo lo que quedó ayer en los cañadones.
Figueroa dijo que las condiciones meteorológicas, con descenso de temperatura y llovizna, ayudaron hoy a la extinción del fuego.
El comandante del Grupo de Bomberos Voluntarios «Ángeles en el Fuego», Juan Alberto Salazar, afirmó que gran parte del incendio se sofocó ayer en la tarde y solo quedó en la parte del cañadón.
«No se pudo llegar al lugar porque estaba en una zona de difícil acceso, pero se llegó al cerro de Trancas, donde el fuego avanzaba con intensidad y con el esfuerzo conjunto se pudo controlar en ese sector, evitando que una casa fuera alcanzada por el incendio», comentó Salazar.
En las labores de sofocación participaron bomberos de la Policía Nacional y Grupos de Bomberos Voluntarios (Ángeles en el Fuego, Guardianes de Méndez y Brasschaat), efectivos militares y comunarios.
A ellos se sumaron personal de las Unidades de Gestión de Riesgos (UGR) de los Gobiernos Municipales de San Lorenzo y El Puente. Figueroa exhortó a los pobladores a no realizar chaqueos en terrenos agrícolas ni quemar basura porque estas acciones aumentan el riesgo de incendios que pone en peligro la vida, la salud y el medioambiente. «La mayoría de los incendios en Tarija son antrópicos, causados por la mano del hombre», lamentó el funcionario.
A comienzos de agosto, se registraron dos incendios de magnitud en la serranía de Sama, con el saldo negativo de 8.000 hectáreas dentro de la Reserva Biológica de Sama y más de 2.000 hectáreas en la zona de amortiguamiento.
El Deber
