En la cárcel de Cantumarcha se encuentran detenidos los tíos de un niño que murió tras sufrir lesiones en su cuerpo y fractura en la cabeza, a consecuencia de los maltratos a los que era sometido.
El comandante departamental de la Policía en Potosí, Fernando Barrientos, indicó que los tíos estaban a cargo del menor de edad desde hace más de un año, tiempo en el que ejercieron todo tipo de maltratos en contra de su sobrino, hecho que se verificó en la autopsia de ley, tras evidenciar lesiones, hematomas y escoriaciones antiguas y nuevas.
«Se determinó que el niño sufría bastante maltrato«, precisó el jefe policial.
Detalló que los resultados de la autopsia señalan como causa de muerte una lesión de centros nerviosos superiores, hematoma subdural, traumatismo encéfalo craneano (TEC) cerrado, presentando además un síndrome de niño maltratado lo que significa que tenía una serie de hematomas y escoriaciones pasadas.
¿Cómo sucedieron los hechos?
Hasta el hospital San Gerardo, la tía del niño de tres años llegó con el cuerpo lesionado del pequeño, lugar donde indicó que éste había sufrido un accidente en su casa; sin embargo, por las lesiones que presentaba, los especialistas observaron que se trataba de algo más que una caída, como alegaban los tíos.
La tía de 33 años y su esposo, un hombre de 42 años, eran los que estaban a cargo de su sobrino, luego que las autoridades determinaran nombrarlos como tutores legales, debido a que los progenitores del menor de edad eran bebedores consuetudinarios.
Los médicos, tras alertar del caso a la Policía, se trasladaron al nosocomio donde por la entrevista realizada a ambos tíos y al verificar las causas de muerte del niño, determinaron aprehenderlos y luego ponerlos a disposición de la Justicia, donde se dictó su privación de libertad.
«La tía decía que su sobrino era caprichoso y él solito se provocaba heridas y golpes, pero las investigaciones determinaron otra cosa. La data del golpe que le quitó la vida al niño, tenía entre diez y 12 horas de antigüedad», dijo.
Este caso se registró como el primer infanticidio en Potosí.
El Deber
