Ante la sospecha de 14 casos de influenza H3N2 con variante K, el Colegio Médico de Bolivia activó una alerta a nivel nacional. El presidente de la institución, Wilfredo Anzoátegui, informó que, en Santa Cruz, el caso sospechoso dio positivo a H3N2 y remarcó que la prioridad es la prevención de esta enfermedad.

“Tenemos que asistir a los centros de vacuna para que reciban la (vacuna contra la) influenza. La gripe K es una variante de la influenza A, que la conocemos nosotros y que se conocía como la H3N2. Ésta es una variante. Ya conocemos las medidas y los síntomas que tienen nuestros pacientes, afectan principalmente a los niños, a las personas adultas, mayores, que tienen alguna enfermedad crónica”, explicó Anzoátegui a EL DEBER.
¿Qué pasó con la paciente que falleció?
El 16 de diciembre, el Servicio Departamental de Salud (Sedes) emitió una alerta naranja tras detectarse un caso sospechoso de influenza en una paciente, que posteriormente fue confirmado como influenza tipo H3N2. La paciente falleció, informó Carlos Hurtado, jefe de Epidemiología del Sedes.
“La persona que venía era una persona mujer de 26 años de edad, de sexo femenino. El origen del vuelo fue Japón, pero pasó por España, por Brasil y llega a Bolivia en muy mal estado. Llega directamente a intubarse y fallece 48 horas después”, indicó en el programa A Primera Hora de EL DEBER.
A pesar de que se trata de una fallecida portando la influenza AH3N2, no se ha confirmado que ella porte la variante K. «Vamos a mandar al exterior para tener la confirmación los próximos días”, añadió Hurtado.
Hurtado explicó que esta enfermedad provoca un cuadro respiratorio bajo, con complicaciones en bronquios y pulmones a partir del segundo o tercer día. Señaló que, a diferencia de la influenza AH1N1 y la H3N2 que circulan habitualmente en el país -que permiten una atención más oportuna con antivirales y monitoreo-, los casos asociados a la posible variante AH3N2K presentan una evolución más abrupta.
En estos cuadros, el compromiso respiratorio puede agravarse en un lapso de 48 horas, lo que obliga a la intubación, el ingreso a terapia intensiva o puede derivar en el fallecimiento del paciente. A nivel nacional, Bolivia registra 1.305 casos confirmados de influenza AH1N1 en lo que va del año.
Recomendaciones preventivas
Entre los síntomas que deben tomarse en cuenta mencionó la tos, el dolor de garganta, el malestar general, el dolor corporal y la fiebre alta. Asimismo, señaló que el cuadro puede presentarse acompañado de síntomas digestivos. “El malestar general va acompañado de otros síntomas, en muchos casos como son los digestivos, diarrea, dolor abdominal, que eso ya se ha visto”, añadió el Anzoátegui.
Además de la vacunación, el médico recomendó ventilar los hogares manteniendo las ventanas abiertas, evitar dar la mano a personas con síntomas, no permanecer en lugares congestionados y mantener distancia de quienes estornuden, tosan o presenten signos de la enfermedad..
“Tiene una alta tasa de contagio, por la forma en que se transmite, pero al mismo tiempo, la tasa de mortalidad está acompañada de lo que vienen a ser las enfermedades que pueda padecer anteriormente nuestro paciente, es decir, los que tengan enfermedades crónicas. Es controlable pero tiene una alta tasa de contagio”, aclaró el presidente del Colegio Médico.
Para hacer frente a la situación, informó que se desplegaron brigadas médicas en los distintos departamentos y que se coordina con las autoridades departamentales para reforzar la respuesta sanitaria.
“Ante el diagnóstico de un paciente, se hace la pesquisa alrededor y se aísla al paciente en su respectivo lugar, ya sea internándolo o viendo si puede realizar un tratamiento ambulatorio. Es como tratar cualquier gripe, pero pueden existir complicaciones”, indicó Anzoátegui.
Respecto al uso de barbijos en los hospitales, señaló que se está coordinando con la Secretaría de Salud de la Gobernación para reforzar su exigencia. Explicó que ya se solicita el barbijo para ingresar a los centros hospitalarios y que esta medida se implementará de manera paulatina, como una práctica que la población deberá retomar.
El Deber
