Choques entre manifestantes y la policía chilena antidisturbios dejaron ayer al menos 10 detenidos y 18 heridos el centro de Santiago. Esto sucedió mientras se desarrollaba una marcha en favor del pueblo mapuche, la etnia indígena más numerosa del país, según informó Carabineros.
Caracterizada como Marcha por la resistencia mapuche y autonomía de los pueblos fue convocada vía redes sociales. La concentración reunió cerca de un millar de personas en el emblemático punto de Plaza Italia, quienes luego se desplazaron hacia la Alameda, principal arteria de la capital chilena.
Entre los manifestantes se pudo ver a representantes de las comunidades indígenas, en su mayoría mujeres, y a personas de todas las edades ataviadas con trajes tradicionales mapuche. La bandera Wenüfoye fue el principal símbolo de la marcha, además de instrumentos como cultrún (tambor mapuche) y trutrukas (instrumento de viento).
Afiches y carteles levantados por los asistentes hacían referencia a la causa mapuche. Consignas como “Libertad a los presos políticos” y “Más de 500 años de lucha” se leían ad portas de una nueva conmemoración del Día Nacional de los Pueblos Originarios el martes 12 de octubre.
A un par de cuadras del inicio de la columna, numerosos efectivos policiales apoyados por carros lanza aguas y gases lacrimógenos disuadieron a la multitud. Esta intentaba llegar al Cerro Santa Lucía para realizar una ceremonia. Los manifestantes respondieron y lanzaron piedras y otros objetos contundentes.
Las escaramuzas se extendieron por cerca de 40 minutos y finalizaron con la dispersión de los congregados.
En las regiones del sur de Chile existe hace décadas el llamado “conflicto mapuche”. Esta es una crisis política que enfrenta a las comunidades con el Estado chileno y empresas forestales que explotan tierras consideradas ancestrales por los indígenas.
Los mapuche reclaman las tierras que habitaron durante siglos. Éstas fueron ocupadas a la fuerza por el Estado chileno a fines del siglo XIX en un proceso conocido como la Pacificación de La Araucanía y que ahora pertenecen en su mayoría a empresas desde la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
Por eso son frecuentes los ataques a maquinaria y predios. El conflicto costó la vida a un gran número de mapuches y policías.
EFE