La súplica y llanto de dos niños, de 9 y 11 años, impidieron que un hombre queme viva a su pareja y madre de los menores, en el municipio de Vinto.

El hecho, que es investigado por tentativa de feminicidio, sucedió el pasado 21 de marzo en el Valle Bajo cochabambino, pero fue denunciado ante las autoridades el viernes, por el temor que la víctima tiene hacia su pareja y agresor.
Según detalló el director departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV), Alfredo Saravia, la pareja sostenía una fuerte discusión en su domicilio, en medio de la cual el hombre, de 36 años, golpeó a su pareja, de 33, y luego le roció gasolina en todo el cuerpo. Posteriormente agarró una caja de fósforos con intención de consumar el hecho, pero el fuerte llanto y gritos de los pequeños evitaron la tragedia. Posteriormente, el hombre huyó, para luego ser aprehendido y trasladado a celdas policiales. Actualmente, el sujeto se encuentra en calidad de detenido en celdas del penal de San Pablo de Quillacollo, mientras duren las investigaciones.
«Así, la violencia pasa a normalizarse, es entonces que cuando sus parejas se portan de formas violentas con ellas, las manipulan y las acosan, pues ellas simplemente no se dan cuenta, no encuentran forma de saber que lo que están viviendo está mal y que va en contra de sus derechos. Estamos hablando de mujeres que ni siquiera conocen sobre sus derechos y mucho menos estarían dispuestas a enfrentarse a sus agresores», indica Fátima Terrazas, representante del colectivo Mujeres de Fuego.
Redacción