Un “ataque masivo” con misiles rusos ayer dejó seis muertos en Konstantínovka, cerca de Bajmut, en el este de Ucrania, el mismo día que el presidente Zelenski conmemoraba el aniversario de la masacre de Bucha alabando a la resistencia ucraniana.

El triste aniversario se produce al día siguiente de que Rusia asumiera la presidencia del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que Kiev calificó de “bofetada” a la diplomacia.
“¡Pueblo ucraniano! Detuvieron a la mayor fuerza contra la humanidad de nuestro tiempo. Detuvieron a una fuerza que desprecia y que quiere destruir todo lo que tiene importancia para la gente”, escribió Zelenski en Telegram.
En el frente, en torno a Bajmut, que es epicentro de los combates desde hace meses, se producían duros enfrentamientos.
La situación en la región “sigue siendo muy tensa”, dijo ayer la viceministra de Defensa de Ucrania, Ganna Maliar.
“El enemigo está empleando no sólo a los combatientes de (la organización paramilitar) Wagner, sino también a las unidades de paracaidistas profesionales. Las bajas (incluso si son) excesivamente altas, no detienen al enemigo”, agregó.
Rusia “sigue concentrando el grueso de sus esfuerzos en acciones ofensivas en los sectores de Lyman, Bajmut Avdiivka y Mariinka”, informó ayer por la tarde el Estado mayor del ejército ucraniano, asegurando que se habían repelido “numerosos ataques enemigos contra Bajmut”.
El mismo día, a unos 27 kilómetros de esta ciudad en ruinas, en Konstantínovka, bombardeos rusos dejaron seis muertos -tres hombres y tres mujeres- y 11 heridos, anunciaron las autoridades ucranianas.
La policía afirmó que Rusia llevó a cabo un “ataque masivo” por la mañana, en total seis misiles S-300 y Hurricane.
“Dieciséis edificios de departamentos, ocho residencias particulares, un jardín de infantes, un edificio administrativo, tres automóviles y un gasoducto” se vieron afectados, agregó.
Lilia, estudiante de Psicología de 19 años y residente de uno de los edificios dañados, estaba “conmocionada”. “Tengo mucha suerte de no haber estado en casa en este momento”, dijo.
Zelenski alabó a los ucranianos que resistieron a las fuerzas rusas en Bucha, un suburbio al norte de Kiev, donde más de 1.400 personas murieron durante la invasión.
El frente de batalla permanece quieto
El aniversario del hallazgo de la masacre de Bucha se produce en un momento de pocos avances o retrocesos en el frente, que se extiende del este al sur del país.
Desde el inicio del año, las tropas de Moscú apenas reivindicaron avances. Los pocos que se registraron se produjeron alrededor de la ciudad de Bajmut, en la cuenca oriental del Donbás, ocupada parcialmente por fuerzas separatistas prorrusas desde 2014.
El ejército ruso no logra traspasar de momento las defensas ucranianas.
Agencias