Según la diputada de Creemos María René Álvarez, la compra de la cámara que supuestamente se usó para espiar al gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, se adjudicó a una empresa que ofrecía servicio de mates y cafés.
“La cámara espía que el régimen de Luis Arce y su ministro de Gobierno (Eduardo Del Castillo), colocaron en la celda del gobernador Luis Fernando Camacho, fue adjudicada de manera irregular por el Ministerio de Gobierno a una empresa unipersonal que ofrecía mates y cafés”, denunció Álvarez en un video que difundió en sus redes sociales.
Página Siete hizo la consulta sobre estas denuncias a la Dirección de Régimen Penitenciario, desde donde respondieron que como ya declaró el viernes el director de esa repartición, Juan Carlos Limpias, “el tema de la cámara espía es un caso cerrado”.
La parlamentaria indicó que sus aseveraciones están basadas en un contrato publicado en el Sistema de Contrataciones Estatales.
“En los papales sorprendentemente termina vendiendo una cámara de seguridad, cables y conectores, al mismo precio de los mates y cafés. Peor aún, la compra de esta cámara espía, dos semanas antes del secuestro (de Camacho), nos confirman que el Gobierno ya tenía un plan para llevar a Chonchocoro al gobernador de Santa Cruz”, sostuvo.
La opositora manifestó que la adjudicación de este contrato es un hecho irregular. Anunció que pedirá informes a la cartera de Gobierno y al Ministro de Economía para que el expliquen cómo dejaron pasar “este procesos irregular”.
Página Siete
