En una audiencia de procedimiento abreviado, el Tribunal de Sentencia Nº 1 de Quillacollo dictó 30 años de presidio sin derecho a indulto contra Moisés Marcos Parra Llanos (40), declarado autor del feminicidio que conmocionó al departamento de Cochabamba en 2024.
La víctima es la expareja del condenado, Gabriela Vásquez A. (30), quien murió tras estar siete días internada en el Hospital Viedma. La sentencia del autor deberá cumplirse en el penal de máxima seguridad de El Abra.
“El sentenciado, al verse descubierto, reconoció haber cometido el delito y solicitó acogerse a la salida alternativa. Se presentó evidencia contundente: declaraciones de testigos, el historial clínico y un examen forense que estableció como causa de muerte un shock hipovolémico por hemorragia interna tras múltiples heridas punzocortantes”, informó el fiscal departamental de Cochabamba, Osvaldo Tejerina Ríos.
El crimen ocurrió el 10 de junio de 2024, en el municipio de Tiquipaya, cuando Gabriela fue atacada en el patio del inmueble donde alquilaba habitaciones. Según narró la fiscal del caso, Ximena Montaño, la mujer se encontraba compartiendo un momento con compañeros de trabajo y estudio, cuando al subir a la segunda planta fue emboscada por Moisés, quien la apuñaló brutalmente en abdomen, espalda, antebrazos y glúteos.
El agresor se encerró en el baño y trató de quitarse la vida, pero fue reducido por la Policía, que tuvieron que usar gases lacrimógenos para que abra la puerta.

Feminicidio que conmocionó
Gabriela fue trasladada de emergencia al Hospital Viedma, donde permaneció siete días en terapia intensiva. Pese a los esfuerzos médicos, falleció tras sufrir un paro cardíaco. La víctima dejó a dos hijos en la orfandad, una adolescente de 14 años y un niño de 6.
Gabriela trabajaba como limpiadora de casas y ayudante de cocina, además de estudiar para ser chef. Según su padre, Clemente V., la relación con Moisés había terminado seis meses antes del crimen, pero la necesidad de electricidad para que sus hijos hicieran tareas escolares la obligó a volver temporalmente a la misma vivienda que compartía con su agresor.
La defensa legal fue asumida por el Observatorio de Justicia de la Fundación Voces Libres, que desde el 14 de junio calificó el caso como tentativa de feminicidio. Con el fallecimiento de la joven, el proceso fue recalificado como feminicidio y tramitado hasta la sentencia ejecutoriada.
Este violentó hecho conmocionó a la población cochabambina e incluso el presidente Luis Arce se pronunció en sus redes sociales lamentando la muerte de Gabriela y exigiendo sanción al agresor.
“Con profundo pesar, me uno al dolor por el feminicidio de Gabriela Vásquez en Cochabamba. Su trágica muerte, tras una dolorosa agonía, no solo deja a dos menores sin su madre, sino que también hiere profundamente el corazón de nuestra sociedad. No podemos tolerar más estos crímenes. La Ley 348 debe ser fortalecida, no cuestionada”, publicó en X, el 18 de junio de 2024.
El Deber