El ministro de Justicia, Iván Lima, y el expresidente Evo Morales convirtieron Twitter en su campo de batalla, pues ambos dilucidan sus diferencias a través de sus cuentas personales en esa plataforma.

“Voy a llevar (esta denuncia) en ese ámbito personal, como les he referido; no quiero pronunciarme y ahondar en debates innecesarios. Lo que voy a hacer siempre es, a través de la cuenta de Twitter, pronunciarme sobre los avances que pueda haber en esta acción”, declaró Lima, quien inició sus publicaciones contra Evo Morales el 13 de agosto.
El exmandatario y el actual ministro de Justicia protagonizan un agudo enfrentamiento y se acusan mutuamente de tergiversar la verdad. Lima dijo que llevará ante la justicia ordinaria a Evo Morales, a quien acusó de haberlo difamado; este le respondió que nunca pudieron llevarlo ante los tribunales.
El exmandatario publicó a las 18:44 de este jueves el más reciente mensaje, en el que agradece la participación de abogados que le expresaron, según su tuit, su deseo de defenderlo en los tribunales cuando sea demandando.
“Muchas gracias a mis hermanas y hermanos abogados patriotas, militantes del MAS-IPSP, que confirmaron hoy su disposición para defenderemos del juicio político que el gobierno nacional armó en mi contra, como parte de su plan para encarcelarme”, señala el post del líder del MAS, quien no acostumbra a hablar a través de los medios y solo usa su cuenta personal o el programa dominical de su radio, Kawsachun Coca.
El ministro dijo que de esta decisión de enjuiciar al expresidente no participaron los dos primeros mandatarios y menos el gabinete de ministros. La gota que rebalsó el vaso fue la acusación de Morales sobre una supuesta manipulación de casos contra el Estado boliviano desde el bufete de abogados de Lima, en Santa Cruz.
“No es una decisión que tenga que consultar ni con el Presidente, Luis Arce, ni con el Vicepresidente, David Choquehuanca, ni con el gabinete, porque es un tema personal. Ustedes saben que los delitos de difamación, de calumnia e injuria pertenecen al ámbito privado”, precisó Lima.
No es el caso de los adeptos a Morales; los asambleístas afines al ‘evismo’ de diferentes departamentos, organizaron sendas conferencias prensa para defenestrar a Lima, para quien el epíteto de “malagradecido” fue el de menor tono.
El vicepresidente del MAS, Gerardo García, fue más allá, dijo que Iván Lima actúa por órdenes de Luis Arce, y advirtió que, con este pretendido juicio, la alianza entre el MAS y el Gobierno quedó definitivamente fracturada.
El Deber