El Ministerio de Salud dio la instrucción a los Servicios Departamentales de Salud (Sedes) aplicar alerta epidemiológica y su manual correspondiente ante la posible llegada de un caso sospechoso de viruela del mono a Santa Cruz.
La cartera estatal pidió no generar alarma en la población, debido a que la enfermedad tiene baja letalidad y hay fármacos para su tratamiento.
Según el director del Programa Ampliado de Inmunización (PAI), Max Enríquez, se debe “trabajar en el manual ante la eventual presencia de un paciente con la viruela del mono, son los lineamientos generales que se les ha facilitado y a partir de eso se determinará cuál es la definición de caso, cuándo denominamos un caso sospechoso, es un caso probable”.
“Se ha informado al Ministerio de Salud lo que hemos dicho ayer y los anteriores días. Se establece la alerta epidemiológica y esto es una vigilancia activa. Producto de esto es que se hace la captación y también la contraparte que es importante. La familia y persona comunica rápidamente y se toman las medidas necesarias, el aislamiento y la toma de muestras”, dijo Enríquez en una entrevista con la red Unitel.
Frente a ese escenario, la cartera de Salud publicó el martes un manual que fue derivado a los Sedes de todo el país. Su contenido dispone de un resumen situacional, forma de transmisión de la enfermedad, vigilancia epidemiológica, estudios investigativos y científicos, además del manejo que se debe dar si se presenta un caso en territorio nacional.
El texto establece además que, ante un caso sospechoso, los profesionales de salud realicen un examen clínico al paciente, recolección y envío de muestras para examen de laboratorio. La investigación de la exposición debe cubrir entre cinco y 21 días antes del inicio de los síntomas.
La mañana de este jueves, autoridades de salud informaron sobre un caso sospechoso de la enfermedad en el departamento de Santa Cruz. Se trata de un paciente de 26 años que tuvo contacto con dos personas que llegaron de Europa y tiene una parte de los síntomas característicos del mal.
Página Siete
